Llueve rojo mientras contemplo
y escudriño esos charcos de turbios recuerdos
Llueve rojo salpicando sobre mis pechos,
rodando por mí vientre
hasta enredarse en la maraña de mí pubis.
Llueve rojo y mis labios pronuncian palabras
sobre esas sábanas ahora resecas.
Guardo silencio en ese amor atemporal
y exprimo esos adverbios complejos.
Demasiados deseos haciéndose charcos,
charco de lluvia roja ...
Por eso hoy pienso y callo y espero en rojo…
y escudriño esos charcos de turbios recuerdos
Llueve rojo salpicando sobre mis pechos,
rodando por mí vientre
hasta enredarse en la maraña de mí pubis.
Llueve rojo y mis labios pronuncian palabras
sobre esas sábanas ahora resecas.
Guardo silencio en ese amor atemporal
y exprimo esos adverbios complejos.
Demasiados deseos haciéndose charcos,
charco de lluvia roja ...
Por eso hoy pienso y callo y espero en rojo…
Si el rojo es tu color.
ResponderEliminarPasion, sensualidad, siempre pasión en tus letras.
No susurres amor cosas al viento ni pienses que no estoy, eso no es cierto.
ResponderEliminarEs tanto mi dolor de no tenerte que transporto mi voz para quererte.
Recibe un beso en tu alma.
Entre el blanco y el rojo, encuentro el rosa de tu poesía.
ResponderEliminarBesotes Ana.
PRECIOSO ANA PRECIOSO.
ResponderEliminarBESOS EN ROJO PARA TI.
MAR
Tus palabras siempre sensuales, siempre tiernas, siempre bellas... como tú Ana.
ResponderEliminarBesos mil.
Juan Lucas.
Vengo un ratito a saludarete y dejarte un pensamiento.
ResponderEliminarHundo mis manos en el fondo bello de tus letras y me pierdo buscando como hallarte.
Recorro el abismo flotando en sensaciones y tu alma me llega florecida;
te detecto y mi nervio enloquecido te abraza y te bendice felíz de haberte hallado
Recibe un beso en tu alma.