


Ya ves lo importante que pueden ser unas manos para alguien cómo yo. Son portadoras de sensaciones intensas, pueden llegar a ser refugio, pueden convertirse en cuenco o recipiente sobre el que escanciar el semen tibio y deseado, pudiendo así saborearlo, el tuyo.
Las manos no solo seducen, acarician y provocan, también se puede ver a través de ellas y hasta convertirse en signos que hablan silenciosamente. No quiero tentar a los dioses con estas palabras cargadas de ambiciones, no deseo que lleguen a molestarse y acaben quitándome esas pocas cosas que aún puedo realizar con ellas, como escribirte esto.
Imagina que tus manos y tus dedos no pudieran recorrerme como es tu deseo. Imagina lo que es el desear algo y saber que no están a tu alcance. Ya, ya sé que soy incorregible, lo sé.
Está sonando una bella canción, la que me ha sumergido en ti y estoy feliz.
Felíz están los dedos de quien te contesta, sabedor que las palabras hablan, y cada dedo encierra una sílaba y cinco dedos encadenadan palabras, y ya sabe que las palabras pueden llegar a ser cuencos, o ser la fuente donde dejar escapar lentamente los deseos.
ResponderEliminarMuchos besos Ana.
De todo me quedo con una frase, que me ha gustado mucho...."
ResponderEliminarte espero sentada a la orilla de tus recuerdos"
También se pescan las letras sobre las aguas de un río,
ResponderEliminarsobre pétalos de rosas, sobre el camino tendido,
sobre tu piel que es hermosa cuando la baña el rocío.
Recibe un beso en tu alma.